Si bien no es necesario ser perfecto para emprender, es bueno conocer cuáles son las capacidades necesarias para triunfar en el contexto moderno. De ese listado, se puede empezar a comparar qué atributos se poseen y pulir lo que haga falta.
Veamos 6 capacidades básicas para convertirse en ese emprendedor que hace crecer una empresa y da brillo a una idea innovadora:
Conocimiento general, o al menos básico sobre el área en el que se van a lanzar. Pueden ser habilidades conceptuales o técnicas.
Motivación y automotivación. Se puede hablar de dos tipos de motivaciones: la motivación intrínseca, que es la que el emprendedor se da a sí mismo. Es el ‘sí lo voy a lograr’, ‘sí se puede’, ‘ésta para mí’. Es decir, el positivismo y la capacidad para motivarse pese a las dificultades. También está la motivación extrínseca, o el apoyo de todas esas personas que le rodean, que dicen ‘tu puedes’, ‘eres capaz’. Tener una red de apoyo, de familia y amigos, puede ser de gran ayuda para salir adelante en los momentos duros.
Asumir riesgos. Esto es fundamental porque todo emprendimiento implica un riesgo. Sin embargo, hoy en día existe la posibilidad de usar herramientas para calcular o minimizar ese riesgo. No se tiene que ir siempre a ciegas. Podemos acudir a la opinión de un experto o hacer un estudio de mercado, entre otras posibilidades.
Proactividad. Hay que adelantarse a los problemas y buscar respuestas para no caer desprevenidos Es importante mantener una visión de mundo clara y ubicarse en el rol del negocio. Es importante mantener un análisis activo sobre los grupos de interés relacionados al emprendimiento, como de los consumidores, los proveedores y la competencia.
Creatividad. “El emprendedor depende de la creatividad”. Es lo que le lleva a la innovación, ya sea para crear un producto nuevo o una nueva forma de fabricar o presentar un producto existente. Mientras más creativo sea el emprendedor, mayor posibilidad tiene de atraer consumidores y convertirlos en clientes. La Investigación y Desarrollo (conocido como I+D), no tiene porque ser exclusiva de las grandes corporaciones, hasta un pequeño emprendimiento personal puede invertir algo de tiempo y recursos en investigar cómo mejorar sus recetas, abaratar costos o hacer más atractivas sus instalaciones.
Persistencia. Aquí hablamos de aplicar valores fundamentales para el emprendedor, como compromiso, persistencia, tolerancia y paciencia. Particularmente se destaca la relevancia de la paciencia y el “compromiso consigo mismo” para alcanzar el éxito.
FUENTE: https://www.tec.ac.cr/hoyeneltec/2018/06/11/primer-paso-emprender-conocerse-si-mismo